Durante el mes de noviembre del 2009 se ha publicado un documento llamado "La Democracia de Ciudadanía: Una Agenda para la construcción de Ciudadanía en América Latina". Este trabajo es una iniciativa conjunta de la Organización de los Estados Americanos (OAE) y el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD).
El debate que inicia este documento "tiene como objetivo contribuir a la formulación de políticas públicas orientadas a disminuir los déficit de ciudadanía que aquejan a las democracias latinoamericanas. Esto es, contribuir a ampliar el horizonte de la democracia exigible en la región".
El trabajo parte de entender que la desigualdad y las asimetrías de poder tienen consecuencias irremediables para la constitución de una democracia de ciudadanía, habida cuenta que "..en América Latina, esas desigualdades se reflejan en la pésima distribución del ingreso. En las últimas décadas, el 10% más rico de la población ha recibido, en el promedio de la región,el 37% del ingreso. Esta proporción es casi tres veces la que ha recibido el 40% más pobre (poco más del 13% del ingreso). Esa desigualdad económica se refleja en muchas otras formas de desigualdad, entre las que destaca la desigualdad en el acceso al poder, un hecho que a veces se deja de lado al analizar los desbalances políticos regionales. Tal concentración de poder, a su vez, puede acrecentar la desigualdad económica".
Espero que la lectura de este documento sirva para comprender la realidad cotidiana de nuestro país.
El debate que inicia este documento "tiene como objetivo contribuir a la formulación de políticas públicas orientadas a disminuir los déficit de ciudadanía que aquejan a las democracias latinoamericanas. Esto es, contribuir a ampliar el horizonte de la democracia exigible en la región".
El trabajo parte de entender que la desigualdad y las asimetrías de poder tienen consecuencias irremediables para la constitución de una democracia de ciudadanía, habida cuenta que "..en América Latina, esas desigualdades se reflejan en la pésima distribución del ingreso. En las últimas décadas, el 10% más rico de la población ha recibido, en el promedio de la región,el 37% del ingreso. Esta proporción es casi tres veces la que ha recibido el 40% más pobre (poco más del 13% del ingreso). Esa desigualdad económica se refleja en muchas otras formas de desigualdad, entre las que destaca la desigualdad en el acceso al poder, un hecho que a veces se deja de lado al analizar los desbalances políticos regionales. Tal concentración de poder, a su vez, puede acrecentar la desigualdad económica".
Espero que la lectura de este documento sirva para comprender la realidad cotidiana de nuestro país.
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